Puigdemont, el bien peinado,
y Mariano Rajoy,
están probando sus pulsos
para ver cual es mejor.
Y todo apunta que, “en bastos”,
acabará la cuestión.
Puigdemont es el don ¡SI!
y Rajoy es el don ¡NO!,
y entre tanto el ciudadano
es quien paga el ¡SI! y el ¡NO!
de esos dos politicastros,
apoltronados los dos.
Cantaba Concha Piquer
el cuplé de “La parrala”
entonando el ¡SI!, que ¡SI!
y entonando el ¡NO!, que ¡NO!
mientras era aplaudida
con visos de admiración.
Bien distinto de esos prendas
que causan preocupación
a todos los ciudadanos
con su actitud del copón.
¡Que se acaben ya los pulsos
de Rajoy y Puigdemont!
Francisco Barbachano
