Técnicos y políticos junto al extraordinario hallazgo

Esta semana, en el transcurso de las excavaciones arqueológicas que se están realizando en las termas romanas de Caldes de Montbui, el equipo de arqueólogos dirigido por Pere Lluís Artigues ha descubierto una cabeza de mármol blanco de tamaño natural que había formado parte de una escultura romana. Las excavaciones, financiadas por el Ayuntamiento de Caldes bajo la supervisión del Departamento de Cultura, se están realizando con motivo de la reurbanización de la plaza de la Fuente del León.

La cabeza ha sido encontrada en buen estado de conservación en el relleno de la piscina termal que hay delante del conjunto visitable y supone la primera cabeza de escultura romana que sale en Caldes de Montbui asociado a una estratigrafía.

Según explicó Lluís Artigues, este hallazgo acaba de desmentir la imagen de austeridad que se tenía del conjunto termal calderín, y reafirma que había espacios decorados.

Hasta el momento se ha hecho una primera limpieza de la pieza, a cargo de Gamarra y Garcia. Conservación y Restauración. Isabel Rodà de Llanza, catedrática de la Facultad de Filosofía y Letras de la UAB (del Departamento de Ciencias de la Antigüedad y de la Edad Media), será la encargada de estudiar esta pieza histórica y determinar la procedencia, datación y identificación. Aún así, como primera hipótesis de trabajo, se podría tratar de una divinidad vinculada con las aguas termales que, por la erosión a una de las partes del rostro, estaría expuesta en contacto constante con un goteo de agua.

El descubrimiento ha sido anunciada esta mañana durante una visita al yacimiento del alcalde de Caldes de Montbui, Jordi Solé; la jefe del Servicio de Arqueología y Paleontología del Departamento de Cultura de la Generalidad de Cataluña, Maite Miró; el arqueólogo director de la excavación, Pere Artigues; el concejal de Patrimonio, Isidre Pineda, y el concejal de Espacios Públicos, Jaume Mauri.

El hallazgo, excepcional por las raras veces en que se puede celebrar la aparición de una cabeza conservado de escultura romana, ha sido celebrada ampliamente por todos los agentes que intervienen en este proyecto de recuperación del patrimonio arqueológico de Caldes de Montbui.

La cabeza de escultura y la nueva piscina, dos hallazgos importantes en el yacimiento

Este hallazgo se suma al descubrimiento de una nueva piscina romana en el subsuelo de la plaza y ante el Museo Thermalia, de dimensiones más reducidas. Con esta, ya son 4 las piscinas localizadas en este ámbito, la más importante la natatio de ante las Termas Romanas, una balsa rectangular de 9 x 15 metros considerada una de las más grandes de Cataluña y de toda la península ibérica.

La labor realizada hasta ahora permite tener una planimetría de las piscinas romanas y también ver cuál ha sido la intervención urbanística que ha habido en esta zona con el paso de los siglos. Así, se ha podido datar restos del urbanismo bajomedieval de la villa termal y también de los siglos XIV hasta el XX. También se concluye que las piscinas que había en Caldes de Montbui tenían una finalidad salutífera, a diferencia de las piscinas que había en las ciudades (que eran usadas como acto social, además del motivo higiénico).

La información que se está obteniendo con esta intervención permitirá crear un espacio con imágenes en 3D y una maqueta a escala que se ubicaría en el museo Thermalia.

La plaza a punto para la Escaldàrium

Estas semanas comienza la parte final de la intervención arqueológica. Después de haber extraído los adoquines de frente a las Termas Romanas y delimitado la superficie de las otras piscinas de época romana se llevará a cabo un proceso de fotometría que permitirá tener una visión de cómo eran las instalaciones  termales hace 2.000 años. Esta intervención finalizará a mediados de junio, y entonces se cubrirán los restos arqueológicos con una capa geotextil y tierra, porque en el mes de julio se puedan desarrollar las actividades culturales previstas, como es el caso del Escaldàrium.