Hoy miércoles está previsto que sigan los problemas en las líneas R2, R8 y R11 de Cercanías de Barcelona afectadas este martes por un robo de cable de cobre en la zona de la estación de Mollet-Sant Fost. Ayer el secretario de Estado de Infraestructuras, Julio Gómez-Pomar, anunció que este miércoles las tres líneas afectadas por el robo de cobre funcionarán, pero con la mitad de frecuencia, y el servicio estará reforzado con autobuses.
Además, Renfe destinará cincuenta personas en las estaciones afectadas para reforzar el servicio de atención al cliente.La prioridad de Renfe es restablecer el trayecto entre Granollers y Barcelona y la conexión con el aeropuerto de El Prat.
Ayer martes se calcula que el problema de Mollet afectó, de una u otra manera, a unos 60.000 usuarios y 200 trenes, un 15% del tráfico de la red de Cercanías.
A lo largo de todo el marte hubo retrasos de más de media hora. Las líneas con problemas fueron la R8, donde la circulación estuvo interrumpida entre Granollers Centre y Cerdanyola Universitat. La R2, de Barcelona a Granollers y el R11, que va de Barcelona a Girona, aunque acumulan retrasos de unos treinta minutos de media. La Generalitat exigió a Renfe y Adif que se minimicen las afectaciones por los usuarios.
A lo largo del día se aclaró el incidente de Mollet y se explicó que hacia las cinco de la madrugada, unos ladrones robaron 360 metros de cable de cobre y cortaron un cable de 3.000 voltios de tensión en Mollet del Vallés, que cayó sobre otros cables y dispositivos informáticos, lo que causó una sobrecarga en las instalaciones que originó tres incendios en distintos lugares de la infraestructura ferroviaria. El fuego afectó a un edificio técnico de Adif y quemó sistemas eléctricos, electrónicos e informáticos, como ordenadores.