Los ciudadanos de Granollers tienen hábitos saludables en cuestiones de comida y bebida: beben agua como principal fuente de hidratación, cocinan en casa alimentos frescos, se mantiene el hábito de comer en familia, está presente la intención de comprar alimentos saludables y la intención de comer fruta…. Así lo señala una encuesta realizada a vecinos de Granollers en el marco del proyecto europeo We love eating (WLE). Pese a todo hay cosas que mejorar: la actividad física que se practica no es suficiente y se tiene que aumentar el consumo de fruta y vegetales.
En concreto, según informan desde el Hospital General de Granollers, los pasados meses de junio y julio se preguntó a 140 niños, 133 mujeres gestantes y 133 personas mayores sobre estas cuestiones para conocer el punto de partida de sus hábitos alimentarios y de actividad física.
A partir de estos datos, el proyecto WLE analizará el impacto que comportarán las diferentes acciones que se desarrollarán en la campaña como programas multidisciplinares de actividad física y salud para abordar la prevención de la obesidad infantil, formación sobre alimentación en mujeres embarazadas , talleres en las escuelas de la ciudad sobre hábitos saludables y revisión de los menús escolares, ciclos de conferencias a la ciudadanía sobre alimentación saludable o difusión y promoción de rutas saludables para caminar.
Granollers conjuntamente con otras seis ciudades de Europa, forman parte del proyecto We Love Eating (WLE, «Nos gusta comer»), un proyecto de salud de la Unión Europea que se enmarca dentro del programa Enjoying Being Healthy («Disfrutando de buena salud «), de fomento y promoción de los estilos de vida más saludables. We Love Eating está dirigido a la población en general, pero hace especial incidencia en niños, mujeres embarazadas y las personas mayores.
Este proyecto educativo, que se encuentra en fase piloto y durará hasta el 2015, cuenta con la participación de: Banská Bystrica (Eslovaquia), Bradford (Reino Unido), Cluj-Napoca (Rumanía), Deventer (Holanda), Poznań (Polonia) y Roncq (Francia). En Granollers esta iniciativa se está llevando a cabo con la participación conjunta del Ayuntamiento de la ciudad, el Hospital General de Granollers, el Institut Català de la Salut y la Agencia de Salut Pública de Catalunya.