JORDI ABAYÀ
La lacra de la violencia de género no cesa y absorbe una enorme cantidad de esfuerzos policiales. En la Región Policial Metropolitana Nord, con sede central en Granollers, que reúne a las comarcas del Vallès Oriental y Occidental, además del Maresme y una parte del Barcelonès, hay un total de 39 agentes dedicados exclusivamente a luchar contra ellas desde los Grups d´Atenció a les Víctimes (GAV). No les falta trabajo. En la actualidad, según explicó el subinspector, Jordi Santacatalina, jefe de la Unitat Regional de Proximitat i Atenció al Ciutadà de la Regió, los GAV realizan un total de 5.294 seguimientos a víctimas de violencia machista. El 2011 se cerró con más de 10.000 seguimientos. En total el año pasado se atendieron 3.534 víctimas y se efectuaron 1.677 detenciones por esta cuestión.
Las estadísticas que ponen en evidencia que la violencia contra las mujeres sigue enquistada en nuestra sociedad, se dieron a conocer este lunes en Granollers con motivo de la presentación del nuevo Plan de Seguridad y Atención a las Víctimas de violencia machista y doméstica. El director general de Administració de Seguretat, Andreu Joan Martínez, fue el encargado de presentarlos junto a Santacatalina y la intendente de la Región Policial, Alícia Moriana. El nuevo plan, que se está implantando en toda Catalunya desde el pasado mes de febrero y que tiene que estar desplegado antes de final de año, afirman que supondrá “una mejora en las tareas de seguimiento, protección y atención” que realizan a las víctimas desde los GAV. La elaboración del Plan de Seguridad ha corrido a cargo de los propios profesionales de la policía catalana y ha comportado la revisión de un total de 22 procedimientos para conseguir, en palabras de Andreu Joan Martínez, lo que supone “un cambio de modelo en el trabajo policial”.
Uno de los principales recursos con que se dota a este nuevo modelo de intervención policial es un recurso informático denominado solución integral de atención a las víctimas de violencia machista y doméstica (SIAV-VMD). Esta solución tecnológica – básicamente una base de datos – registra toda la información relacionada con el entorno de la víctima (expediente policial, tipo de delito, situación familiar…) con el objetivo que los GAV puedan hacer un seguimiento más eficaz. Otra novedad es la valoración policial del riesgo de la víctima. Ahora para cada nueva víctima, se elabora un cuestionario de valoración del riesgo policial. El resultado de esta valoración policial del riesgo determinará el nivel de protección adecuado para cada víctima. Básicamente se definen tres niveles de protección: Alto, Mediano y Bajo, y un cuarto supuesto que es la ausencia de riesgo. En función del riesgo se establecerán diferentes niveles de protección policial.
LA AYUDA DE LOS AYUNTAMIENTOS
El director general de Administració de Seguretat, Andreu Joan Martínez, explicó que con el nuevo procedimiento por primera vez las bases de datos del Departament d´Interior se conectan con los de Benestar Social o Justícia. Esto permite, por ejemplo, a la policía acceder a informaciones importantes para la protección de las víctimas como los permisos carcelarios. “Es importante saber cuando un maltratador está de permiso”, señaló. Andreu Joan Martínez, sin embargo, señaló que el “círculo” de la protección preventiva a las víctimas no se cerrará hasta que se incorpore el mundo local. Martínez señaló que estaban trabajando para ofrecer a los ayuntamientos, a través de las Diputaciones, reforzar lazos para mejorar las actuaciones preventivas.