ALBERT SEGURA
La Plataforma d’Afectats per la Hipoteca de Mollet del Vallès ha solicitado la condonación de la deuda de una familia de origen marroquí afincada en la ciudad. Bouchaib Belfquih y su esposa Asma Bel Faqyh adquirieron el piso ubicado en la calle Jacinto Benavente de la localidad el año 2007 y firmaron una hipoteca con La Caixa. En el año 2009 la crisis golpeó a Belfquih que perdió su empleo y con él la capacidad para mantener a su mujer y a sus dos hijas. El banco subastó el inmueble hace unos meses y dejó a los afectados con una deuda de 220.000 euros y un desahucio pendiente de ejecutarse. La familia podría quedarse en la calle este mismo viernes, puesto que es el día en que está previsto que un agente judicial se persone en el domicilio.
Como muchos inmigrantes, Bouchaib Belfquih y su esposa Asma Bel Faqyh, llegaron a España con la ilusión de empezar una nueva vida hace poco más de diez años. La pareja, afincada en Mollet del Vallès decidió comprarse un piso en el año 2007, cuando nació su primera hija -actualmente tienen dos-.
“En aquel momento La Caixa no puso ningún problema para concederles la hipoteca, aunque nosotros creemos que la entidad debería de haber contemplado el riesgo que corría”, comenta Mariano Peinado, portavoz de la plataforma que relata cómo, con el paso del tiempo la situación económica del matrimonio empeoró hasta el punto que en 2009 “se vio obligado a escoger entre mantener a sus hijas o pagar la cuota mensual de la hipoteca”.
Tres años después el banco ha subastado el piso y ha dejado a la familia con una deuda de 220.000 euros “imposible de asumir”. Según el portavoz de la plataforma, “el matrimonio sólo pide tiempo” para que el desahucio se retrase y su hija mayor, de cinco años y escolarizada en Mollet, pueda terminar el curso: “Después ellos se trasladarán a Almería donde tienen familiares que pueden acogerlos”, comenta.
Con este objetivo, el pasado martes los representantes de la plataforma molletense se reunieron con el subdirector de la oficina de La Caixa ubicada en la Rambla Fiveller para solicitar la condonación de la deuda de la familia y la congelación del desahucio. “No sabemos si hemos llegado a tiempo, ya que en este caso los afectados tardaron mucho tiempo en ponerse en contacto con nosotros y el desahucio está programado para este mismo viernes”, lamenta Peinado, quien remarca que Belfquih y su familia “no reciben ninguna ayuda” por lo que necesitan que se “extinga la deuda” ya que “jamás podrán pagarla”.
Paralelamente, esta semana los miembros de la plataforma han iniciado los trámites legales para paralizar el proceso. Al cierre de esta edición la familia todavía no sabía si hoy viernes debería de abandonar su casa.
EL PASADO MES DE MARZO, varios miembros de la plataforma y también de la Associació de Veïns de Can Borrell se reunieron con representantes de Adigsa para informarse acerca del estado de los pisos de alquiler público que existen en Mollet y que, según Peinado, “en muchos casos están ocupados por personas que cobran más de lo establecido”. El portavoz comenta que el hecho de que el pasado 31 de marzo el Ayuntamiento de Mollet del Vallès anunciase que a partir de ahora sería esta administración la que gestionaría los inmuebles de alquiler social de la ciudad, no es una garantía que este tipo de irregularidades se corrijan: “Si tener las competencias no se traduce en un cambio de políticas no se solucionará nada, porque estos pisos sociales no se utilizarán como tales”, lamenta.