Caldes, 22 de abril de 2013
Los vecinos de Caldes de Montbui ya pueden volver a mirar en dirección a la riera. Hace unos días finalizaron los trabajos de mejora puestos en marcha en 2010, y presenta ya un aspecto muy diferente al que tenía. Tanto que los responsables políticos del municipio se han propuesto que este espacio, abandonado en los últimos años, sea ahora “redescubierto” y “disfrutado” por la ciudadanía. El fin del proyecto fue presentado en rueda de prensa el pasado lunes por el alcalde de Caldes, Jordi Solé, y por el concejal de Espacios Públicos y Sostenibilidad, Jaume Mauri.
La última fase del proyecto llevada a cabo entre diciembre de 2012 y la actualidad se ha centrado en la mejora del entorno natural del cauce, desde el puente románico hasta el Molí d’en Ral. Esta obra fue licitada por € 76.550 y no ha supuesto ningún coste para las arcas municipales, porque está íntegramente subvencionada por el Consorci per a la Defensa del Riu Besòs y por los fondos de la Ley de Barrios.
Las tareas realizadas han conseguido potenciar los valores originales de la riera de Caldes y fortalecer los valores específicos de la flora y la fauna autóctonas. Para ello se han llevado a cabo actuaciones como la supresión de especies de flora exótica, la supresión de las zonas de huertos irregulares colocados en la zona inundable, la reconstrucción de la canalización para conducir el agua hasta el Molí d´En Ral, el acondicionamiento del paso a Mas Palet, entre otras actuaciones.
El Ayuntamiento de Caldes espera que con toda esta actuación “el cauce inicie un proceso de recuperación de la vegetación autóctona en detrimento de elementos invasores o de usos que son incompatibles con este entorno natural”.
La actuación es una continuación de las que se realizaron entre los años 2010 y 2011 y que afectaron a la reconstrucción y embellecimiento de un paseo paralelo al cauce, que comienza en el Safareig de la Portalera y termina a la altura de la capilla de Santa Susanna.
